La electroestimulación es una tecnología que utiliza impulsos eléctricos para estimular los músculos y es adecuada para una amplia abanico de personas. Ya sea para aumentar la masa muscular, recuperarse o tratarse, el uso de un electroestimulador puede ser útil. En GimnasioenBurgos te explicamos todo acerca de esta técnica.
Contenidos
- 1 ¿Qué es la electroestimulación?
- 2 ¿Por qué utilizar EMS?
- 3 ¿Para quién es la electroestimulación?
- 4 Los diferentes dispositivos EMS
- 5 El cinturón de electroestimulación, ¡un dispositivos específico para fortalecer los abdominales!
- 6 La electroestimulación sola: no es una solución a largo plazo
- 7 ¿Por qué combinar la formación voluntaria y la EMS?
- 8 ¿Cómo obtener resultados?
- 9 Para concluir
¿Qué es la electroestimulación?
La electroestimulación, o electromioestimulación (EMS), consiste en provocar una contracción muscular mediante impulsos eléctricos. Estos impulsos son generados por un dispositivo y transmitidos a través de electrodos aplicados directamente sobre la piel, a nivel del músculo objetivo.
El objetivo de la electroestimulación es reproducir el proceso de una contracción muscular voluntaria de forma idéntica o casi idéntica.
Por contracción muscular voluntaria, entendemos la contracción ordenada por nuestro cerebro a nuestros músculos. En la contracción voluntaria, nuestro cerebro ordena los músculos mediante señales eléctricas a las fibras nerviosas. Nuestros músculos se contraen en respuesta a estas señales eléctricas. Cuando se utiliza un dispositivo de electroestimulación, la corriente eléctrica transmitida a nuestros músculos a través de los electrodos reproduce el mismo tipo de señal eléctrica que la transmitida por nuestro cerebro durante una orden voluntaria. Así, nuestros músculos se contraen bajo el impulso eléctrico generado por el dispositivo de electroestimulación.
¿Por qué utilizar EMS?
Cada vez son más las personas que utilizan la electroestimulación y los motivos son igual de variados. De hecho, la EMS no sólo se utiliza para hacer ejercicio o aumentar la masa muscular. Puede utilizarse en diferentes ámbitos, como el deporte, el fitness y el bienestar, o la salud.
Deporte
- Para completar un programa de musculación
- Para ganar en potencia muscular
- Aumentar la masa muscular
- Aumentar el rendimiento
- Mejorar la relajación (fuerza explosiva)
- Para calentar antes de un esfuerzo más intenso
- Favorecer la recuperación tras un esfuerzo físico intenso Prevenir la aparición de calambres
Fitness y bienestar
- Mejorar su condición física
- Recuperar el tono muscular
- Ayuda a quemar grasa
- Poner en forma tus músculos
Salud
- Recuperar el volumen muscular tras un periodo de inmovilización
- Mejorar la circulación sanguínea
- Evitar el efecto «piernas pesadas
- Tratar los dolores musculares como el dolor de espalda, el lumbago, etc.
- Tratamiento de la tendinitis
- Aliviar los calambres y prevenir su aparición
- Aliviar las contracturas
¿Para quién es la electroestimulación?
La electroestimulación es utilizada desde hace años por muchos deportistas y atletas de alto rendimiento. De hecho, ya sea para recuperarse después del ejercicio, relajar los músculos, para calentar o perfeccionar su entrenamiento y aumentar su resistencia física, los deportistas utilizan a menudo equipos de EMS. Algunas marcas ofrecen una variedad de programas que van desde el puro entrenamiento de fuerza hasta programas para prevenir calambres y tratar la tendinitis.
Los deportistas no son los únicos que los utilizan. El personal médico (fisioterapeutas, osteópatas, médicos…) también utiliza la electroestimulación para tratar a sus pacientes. Los beneficios de esta técnica de estimulación muscular son numerosos y reales: mejora de la circulación sanguínea, aumento del volumen muscular, tratamiento de lesiones… Algunos fisioterapeutas utilizan la EMS para aliviar y tratar las lumbalgias, los dolores de espalda, las tendinitis… otros utilizan estos aparatos para estimular suavemente los músculos durante o después de un largo periodo de inmovilización, tras una operación por ejemplo. Es una forma excelente de limitar la atrofia muscular cuando ya no se pueden contraer los músculos voluntariamente.
Desde hace algún tiempo, los dispositivos de electroestimulación han ganado en popularidad y son cada vez más comunes. Todo el mundo tiene ahora acceso a la tecnología EMS, más o menos avanzada según la marca y el dispositivo en cuestión. Ya sea para la rehabilitación, para el aumento de la fuerza muscular, para la recuperación después de sesiones deportivas intensas o simplemente para aliviar el dolor y relajarse, ¡los electroestimuladores son para todos!
Los diferentes dispositivos EMS
Hay muchas marcas conocidas en el mercado de la electroestimulación: Cefar, Slendertone, Beurer, Compex, SportElec, Mihabodytec… Todas ellas compiten en términos de innovación e investigación para ser cada vez más eficaces y estar más atentas a sus clientes.
Los dispositivos de electroestimulación son, por tanto, numerosos y variados. Encontramos electroestimuladores de diferentes formas: cinturones abdominales, brazaletes para los brazos, las rodillas o los muslos y otros paquetes de electrodos que se colocan de forma diferente según los objetivos marcados. Con todos estos dispositivos, todas las partes del cuerpo pueden beneficiarse de la tecnología EMS.
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El cinturón de electroestimulación, ¡un dispositivos específico para fortalecer los abdominales!
En lo que respecta a los músculos abdominales, puedes elegir: o bien optas por el cinturón de electroestimulación abdominal, o por un dispositivo con electrodos. No obstante, cabe señalar que el cinturón abdominal es más práctico porque no hay cables que sobresalgan y no hay que buscar dónde colocar los electrodos.
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La electroestimulación sola: no es una solución a largo plazo
Es importante tener en cuenta que la electroestimulación no es un remedio milagroso para conseguir unos abdominales concretos o unos muslos bien formados. Sin embargo, si se combina con sesiones deportivas, la EMS puede ser realmente beneficiosa. Por lo tanto, puede optar por realizar sesiones de entrenamiento voluntario y luego sesiones de electroestimulación. También puede optar por trabajar sus músculos al mismo tiempo que una sesión de EMS para ganar en eficacia. De este modo, seguirá entrenando como de costumbre, pero se beneficiará de una preciosa ayuda para progresar más rápidamente.
¿Por qué combinar la formación voluntaria y la EMS?
Cuando se utiliza en una sesión de musculación, la electroestimulación ayuda a desarrollar músculos que son un poco más difíciles de utilizar en los ejercicios «clásicos». Combinar la EMS con las contracciones voluntarias permite producir un esfuerzo más intenso. De este modo, podrás ganar potencia o volumen muscular más rápidamente que si sólo hicieras entrenamientos en interior.
De hecho, la electroestimulación empuja el trabajo muscular al máximo, lo que permite obtener mejores resultados sin descuidar los gestos específicos del movimiento realizado. Por lo tanto, en un proceso de progresión, es interesante integrar la EMS en sus sesiones de entrenamiento con pesas o de preparación física.
¿Cómo obtener resultados?
Evidentemente, los ejercicios varían en función de los músculos que se quieran trabajar. Por ejemplo, si quiere trabajar los músculos abdominales, puede combinar la EMS con ejercicios de envoltura abdominal, utilizando un cinturón de electroestimulación abdominal, por ejemplo. De este modo, trabajará sus músculos de forma óptima, ya que serán solicitados tanto por la contracción voluntaria asociada al ejercicio abdominal como por los impulsos eléctricos generados por el electroestimulador. Cuanto mayor es la intensidad de la corriente eléctrica transmitida por los electrodos, más se contraen los músculos y, por tanto, más trabajan y se desarrollan. Combinando la contracción voluntaria y la electroestimulación, obligas a tus músculos a rendir más y mejor.
El interés de la EMS es provocar una contracción muscular lo más eficaz posible aumentando la intensidad y/o la duración de los impulsos eléctricos. Para que sea eficaz y tenga un verdadero interés, la intensidad debe aumentar lo más posible (hasta el máximo tolerable) a lo largo de cada sesión y, sobre todo, debe ser regular. 3 sesiones de entrenamiento por semana durante 6 semanas le permitirán obtener una clara progresión. Después, se aconseja mantener 1 sesión por semana para no perder los beneficios adquiridos.
Para concluir
Ya sea un gran deportista, un entusiasta del deporte, un aficionado a los productos de fitness y bienestar o simplemente un analgésico eficaz, a todos nos interesa utilizar un aparato de electroestimulación. ¿Quién no se ha mirado al espejo y se ha preguntado cómo conseguir un abdomen más definido o una figura más tonificada? Fijando objetivos concretos, podemos conseguir buenos resultados con esta tecnología. Sin embargo, no hay que perder de vista que la electroestimulación complementa el deporte, no lo sustituye. Para obtener los máximos resultados, lo ideal es combinar la contracción voluntaria y la EMS. La acción combinada de la electroestimulación y la práctica regular de deporte son totalmente beneficiosas, siempre que se mantenga un estilo de vida saludable y una dieta equilibrada.
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