Las prohormonas son sustancias que se producen de forma natural en el organismo y que pueden tomarse como suplementos para ayudar a aumentar la masa muscular y la fuerza. Aunque se denominan a veces «esteroides legales», no son lo mismo que los esteroides anabólicos, que son ilegales. Las prohormonas pueden comprarse sin receta y, en general, se consideran seguras cuando se utilizan según las indicaciones. Sin embargo, existen algunos riesgos asociados a su ingesta, por lo que es importante estar informado antes de utilizarlas.
¿Qué son las prohormonas?
Las prohormonas son hormonas que ayudan a moldear el cuerpo influyendo en su desarrollo y crecimiento. Desempeñan un papel importante en la pubertad, el desarrollo sexual y la fertilidad. En los últimos años, estas se han sintetizado en laboratorios y se han convertido en suplementos que pueden tomarse por vía oral. Estos suplementos afirman que Aumentan la masa muscular Aumentan la fuerza Mejoran el rendimiento deportivo Aunque estas afirmaciones no han sido probadas, algunas personas ven resultados después de tomar prohormonas. Sin embargo, también existen riesgos potenciales asociados a su consumo.
Efectos secundarios de las prohormonas
Las prohormonas pueden causar una serie de efectos secundarios, entre ellos :presión arterial alta, daños en el hígado, daños en los riñones, acné Pérdida de cabello, los participantes en los estudios han informado de que han experimentado estos efectos secundarios después de tomar suplementos.
Sin embargo, no está claro si las prohormonas fueron la causa directa de los efectos secundarios o si intervinieron otros factores. Se necesita más investigación para determinar los riesgos a largo plazo de tomarlas.
Conclusión
Antes de tomar cualquier suplemento, es importante investigar los posibles riesgos y beneficios. Aunque los suplementos de prohormonas no están regulados por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA), hay algunas pruebas de que pueden causar efectos secundarios. Si está considerando tomarlas, hable primero con su médico o especialista de la salud para asegurarse de que son adecuadas para usted.
